
La mayoría de las personas que deciden empezar a cambiar sus hábitos lo han estado pensando durante mucho tiempo. Un día, algo les impulsa a dar el primer paso: venir a consulta o empezar a entrenar.
Pero, ¿Qué es exactamente lo que los motiva a venir?
¿Qué te hace dar el primer paso?
La mayoría de las veces, lo que nos impulsa a cambiar no viene de nosotros mismos, sino de un factor externo. Algunas razones típicas por las que la gente decide empezar a entrenar o mejorar su alimentación son:
Un comentario ajeno → "Te veo más fuerte, ¿puede ser?" o "¿Has subido de peso últimamente?".

Presión de la pareja o familia → "Deberías venir conmigo al gimnasio", "Empieza a comer mejor, por tu salud".
Recomendación médica → "Tienes que mejorar tu alimentación y hacer ejercicio si no quieres que esto empeore" o peor aún, cuando la enfermedad ya está presente.
O el clásico: "Tengo que adelgazar para la boda de mi primo."
Estos factores pueden ser suficientes para dar el primer paso, pero ¿Qué pasa después?
Motivación externa vs. motivación real
Supongamos que logras tu objetivo inicial. ¿Qué te sigue motivando para cuidarte?💭 ¿Sigues adelante o vuelves a los mismos hábitos de antes?
Aquí es donde entra algo clave: la motivación intrínseca.
Para que el cambio sea duradero, necesitas encontrar una razón real que salga de ti. No basta con un objetivo temporal; debe ser algo que te haga querer estar bien siempre.

Ejemplos de motivación real:
✅ Quieres estar saludable y con energía para disfrutar de tus hijos.
✅ Quieres sentirte fuerte, ágil y en control de tu cuerpo.
✅ Quieres romper con patrones familiares y ser un ejemplo para los demás.
El cambio no llega de la noche a la mañana
No te despiertas un día con una revelación que te cambia la vida. La motivación se construye poco a poco, a medida que empiezas a ver cambios y logros.
Quizás esa motivación externa inicial te ayudó a dar el paso, y eso no está mal. Pero la clave está en encontrar una razón más profunda que te mantenga firme en el proceso.
Pasito a pasito, con metas realistas a corto plazo, irás adquiriendo conocimientos y herramientas para que este cambio se convierta en un hábito. Y un hábito es algo que haces sin esfuerzo, sin pensarlo, porque forma parte de tu vida.
Cómo trabajamos la Motivación para cambiar hábitos en consulta
En mis sesiones, te ayudo a:
✔ Reflexionar sobre tus hábitos actuales y entender qué te ha llevado hasta aquí.
✔ Superar los momentos difíciles, cuando es más complicado tomar buenas decisiones.
✔ Construir estrategias personalizadas para que la alimentación saludable y el ejercicio no sean una carga, sino un estilo de vida.
El cambio empieza por ti
💡 Pregunta para reflexionar:👉 ¿Quieres estar bien solo por unos meses o quieres que este cambio sea para siempre?
Si lo segundo es tu respuesta, entonces es momento de empezar a mirar hacia adentro, encontrar tu verdadera motivación para cambiar hábitos y trabajar en ello.
Te has encontrado en esta situación? Cuéntamelo en comentarios, me encantaría saber cómo manejas tu motivación.
¿Listo para dar el primer paso? Contáctame y empecemos juntos.
Comments